La traición de la memoria.

Hoy me di cuenta que se me ha ido borrando de la mente el rostro de mi padre. Hace casi 15 años que lo vi por última vez, exactamente la mitad de mi vida y por lo tanto más de la mitad de los años que guardo en la memoria. Intenté recordarlo cuando vi el rostro de un caballero que me dió la impresión de parecerse. Me di cuenta que hay partes de él que ya no recuerdo. Perdí el contorno de las mejillas, la boca que se escondía tras el bigote. Mi recuerdo comienza a parecerse a una de esas viejas fotos en color sepia que con el desgaste de los dedos o el roce de las páginas en los libros polvorientos y olvidados en un rincón se van borrando de a poco, descascarándose hasta que no quede nada. Aún no sé cómo funciona la memoria, he vivido relativamente poco tiempo, recién comienzo a conocer el olvido. Y es jodido porque haces un esfuerzo grande por reconstruir pero es infructuoso, siempre se te escapan. Aún no sé a dónde van, quizás algún día regresen o simplemente regresarán falsos recuerdos, y al final da igual si regresan, desconfiaré de ellos porque sabré que no me daré cuenta de que he ido sustituyendo mi recuerdo con pedazos de palabras ajenas, movimientos ajenos, caras ajenas como la de ese hombre que me dió la impresión de parecerse a él.

2 comentarios:

Unknown dijo...

hola.. a mi se me olvidan las cosas tambien.. una vez se me perdio mi cartera y estuvimos buscandola, pero no la encontramos... como dos semanas despues aparecio en el freezer de mi casa jajaja.. parece que la puse ahi y ni me di cuenta

The Box Observer dijo...

Ja! Seguramente dejé a mi papá en e freezer también. Voy a buscar a ver... Gracias por la visita.